martes, 6 de agosto de 2013

Incendios, bomberos y capitalismo



Semanas de incendios en nuestra ciudad, donde varios fuegos de diversa magnitud han afectado a diversos puntos tanto de la propia capital como del área metropolitana.

 

En primer lugar hay que expresar la gratitud de la clase obrera a los miembros del cuerpo de bomberos de la ciudad y provincia de Sevilla. No solamente por el trabajo desarrollado en bien de la comunidad, sino por aguantar estoicamente las condiciones vejantes, humillantes y de miseria que les ofrecen los diversos grupos de gobierno capitalistas de la ciudad.

 

Y es que es bien sabido que los bomberos de Sevilla son uno de los sectores de la clase obrera más abandonados por las sucesivas siglas que han desfilado por el ayuntamiento: desde el Partido Andalucista hasta el faccioso Partido Popular, pasando por el inefable gobierno de coalición PSOE-IU. Todos y cada uno de estos gobiernos han llevado a cabo las políticas que el capitalismo les dictaba, no es de extrañar por ello que los bomberos sean uno de los colectivos con mayor conflictividad laboral y abusos de nuestra ciudad.

 

Miremos a la propia prensa burguesa, y leamos sobre lo que los burgueses mismos nos cuentan sobre este problema:

La escasez de personal en los Bomberos de Sevilla, repartidos en los cuatro parques, es un hecho. Lo reconoció el pasado 30 de julio el propio delegado municipal Demetrio Cabello, que dirige las áreas de Seguridad y Movilidad. "Es difícil mantener los servicios mínimos; no obstante, hasta la fecha se ha podido garantizar una dotación completa por parque, es decir, un vehículo de salida que supone un mando, cuatro bomberos y un bombero conductor, estando los cuatro parques operativos", respondió el edil

Es decir, los propios gestores de las instituciones burguesas reconocen que hacen falta trabajadores y que no pueden cumplir siquiera los servicios mínimos que requiere la ciudad.

 

Sigamos, sobre estos mismos servicios mínimos:

 

El Sindicato Profesional de Bomberos denuncia también que en agosto la plantilla estuvo 12 días por debajo de los 61-62 efectivos mínimos de guardia recomendados para atender a toda la ciudad. La cifra diaria osciló entre los 34 y los 52 entre los días 11 y 24 de agosto, excepto en las jornadas del 15 y el 20.”

Ellos mismos reconocen la falta de medios, la falta de material, y que los trabajadores tienen que echar horas en zonas que no son de su competencia ante la escasez:

Según el concejal de Seguridad, en la actualidad hay una dotación disponible de un vehículo de salida y uno de altura (escala) por cvada parque. En suma, entre todos los parques, "en las condiciones actuales disponemos de un mínimo de cuatro vehículos de salida y uno o dos vehículos de altura o apoyo, suponiendo un total de seis vehículos de intervención, además de una ambulancia y dos vehículos ligeros de Jefatura que son conducidos por los responsables de guardia en caso de necesidad".

Responde también que es "habitual" la colaboración con los Bomberos de la Diputación Provincial, por la que el cuerpo de la capital suele actuar en la barriada de Montequinto y en los polígonos industriales próximos a la capital, como en los últimos incendios en los polígonos La Red y El Pino
.”

Pero lleguemos ya al súmmum de la desvergüenza, donde el político al servicio de los capitalistas se quita la careta:

El responsable político del gobierno de Juan Ignacio Zoido apunta como causas el "actual conflicto laboral y la solicitud masiva del programa de productividad". En una palabra, las tensiones con la plantilla, representada por el sindicato profesional, y la negativa de los agentes a echar horas extras hasta que se garantice que las van a cobrar.”

Eureka!, resulta que todo este conflicto viene dado porque los trabadores quieren cobrar para poder comer ellos y sus familias, vestirse, y pagar la hipoteca. Además los trabajadores cometen el “pecado” de querer tener los compañeros suficientes para cubrir las necesidades de protección contra incendios de la ciudad, aunque sea de manera mínima. ¡Pecadores!,¡como osan pedir semejantes imposibles!(nótese la ironía).

 

Toda esta situación nos demuestra varias cosas. En primer lugar que en el capitalismo las necesidades del pueblo no son una prioridad, sino que lo son las necesidades de los burgueses. Mientras se recapitaliza(es decir, se regala el dinero) a las empresas capitalistas por excelencia(los bancos), se quita el dinero destinado a satisfacer las necesidades del pueblo.


Por otro lado comprobamos uno de los dogmas del capitalismo, que pocos trabajadores realicen el trabajo para el que se requieren muchos de ellos. Así, la empresa en este caso municipal ahorra dinero, que se reparten jerifaltes, amiguetes y estómagos agradecidos del régimen, ya sea con el PP, como con el PA, o con el PSOE-IU o lo sería con los reaccionarios de UPD.

 

Por tanto no es sólo un conflicto laboral, ni un problema local. Es un problema del mismo sistema. Un sistema orientado a satisfacer las necesidades de un puñado de capitalistas, un sistema que sufre de crisis cíclicas debidas a su propio funcionamiento y que pagan los trabajadores, un sistema en el que el poder pertenece a los capitalistas y lo gestionan sus lacayos en las instituciones.

 

Urge pues poner fin a este sistema, el capitalismo, y conseguir no solamente unos servicios de carácter público, sino unos servicios al servicio de la clase trabajadora que se inserten dentro de la planificación económica de la sociedad. Porque únicamente de este modo podremos tener los coches de bomberos necesarios, los turnos justos, o el personal suficiente para combatir la amenaza del fuego en Sevilla. Es una quimera el pensar que el capitalismo, por arte de magia, va a arreglar estas dantescas situaciones que afectan a uno de los colectivos de trabajadores más necesarios de nuestra ciudad.

 

Una vez más, mostramos el agradecimiento a los bomberos de la ciudad, los animamos a no ceder ante el chantaje patronal a la vez que los invitamos a sumarse a la lucha por una sociedad sin clases ni capitalismo, una sociedad comunista.

No hay comentarios:

Publicar un comentario